Gadafi ha muerto

Las noticias de la guerra en Libia han llegado a las redacciones occidentales con cuentagotas y siempre mediatizadas por la fuente que las emitía. Si era la televisión oficial libia, se tomaba con reservas, y si eran los rebeldes, también.

En las redacciones extranjeras, cualquier movimiento se esperaba a ser cotejado por algún otro 'observador' internacional... Todo, menos la captura y la muerte de Gadafi que puede pasar a la Historia como el asesinato más fotografiado y grabado.

Y no sólo el tiempo de su muerte, el Comité Nacional de Transición (CNT) se comprometió a dejar que todos los que quisieran visitaran el cadáver durante su 'velatorio'. Eso sí, para enterrar los cuerpos del dictador y de su hijo sí se va a escoger un lugar secreto, sobre todo, para evitar que se construya un mausoleo sobre su tumba.

Su cuerpo, junto al de su hijo Mutassim Gadafi, fue trasladado a Misrata, donde se habilitó hasta una cámara frigorífica para mantener los cadáveres en condiciones de seguir recibiendo los flashes de quienes querían posar, con signos de victoria, junto al dictador muerto.

Una hora después del ataque de la OTAN a Sirte, los rebeldes anunciaban la muerte del dictador. En ese momento, la noticia se publicaba con interrogantes en los medios occidentales, antes de que una foto del cadáver, tomada por un teléfono móvil y distribuida por la agencia France Presse, "demostrara" que el dictador había caído finalmente.

Hasta la imagen, que vale más que mil palabras, fue puesta en cuestión durante unos minutos, pero pronto empezaron a llegar vídeos de la captura y hasta de la muerte o ejecución de Gadafi, vídeos de sus últimos minutos durante la captura... y hasta de la apertura de la cámara frigorífica con las dos reliquias como atracción pública.

Este exhibicionismo que ha marcado el fin del dictador se ha explicado por algunos como la demostración de fuerza necesaria de los rebeldes y una forma de evitar que surjan fantasmas en cuanto su muerte, como surgió al principio con otros objetivos alcanzados como Bin Laden.

El propio Pentágono se vio obligado a publicar algunas fotos de los compañeros de Bin Laden que fallecieron durante la operación contra la casa donde vivían pero se ha cerrado en banda cuando se le ha pedido una prueba de muerte del ex líder de Al Qaeda. Ni siquiera su cadáver, supuestamente lanzado al mar, quedará como testigo de su eliminación.